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Sobre esta obra

Es una de las imágenes que surgieron de Caminantes de Sloane, serie vinculada a mi descubrimiento de la animación.    Sobre la serie Caminantes de Sloane El día que comprobé que bastaban tan sólo ocho dibujos puestos en bucle para crear la ilusión del paso humano, caí rendida a esa magia. A partir de ahí y durante un tiempo, me dediqué insistentemente a hacer gifs de diferentes personas caminando sin fin. Luego aspiré a un poco más y me atreví con una escena coral. Para ello me basé en un instante en plena rush hour londinense en el que tres mujeres muy distintas cruzan sus caminos. Aquí la cosa se complicó un poco. Ya no bastaban ni ocho ni 24 dibujos, sino que fueron necesarios 80. Y todo ello para obtener Caminantes de Sloane, una animación que quedó bonita…de sólo siete segundos de duración. Cuando me hube recuperado un poco de la impresión, descubrí emocionada que la “película” me había dejado además un regalo sorpresa: un montón de fotogramas esperándome para empezar un nuevo juego. Me dediqué a superponerlos, encuadrarlos y combinarlos digitalmente y de allí surgió una nueva obra, ahora estática.  Así fue como los dibujos en gouache, destinados en principio a ser únicamente fotogramas, acabaron formando las diversas composiciones de esta serie de giclées.